Nombre de la ruta:
Cotos, Falda de las Cabezas y río de la Angostura
(Pto. Cotos-Las Cerradillas-Raso del Baile-Valhondillo-Peñalara-Cerradillas-Cotos)
Origen:
Puerto de los Cotos (Rascafría, Madrid)
Destino:
Circular
Distancia:
20 km
Desnivel:
475m (acumulado 620m)
Cotas:
Inicio: 1823m - Máxima: 1846m - Mínima: 1370m
Duración:
6h
Piso:
Pista forestal (87%), camino (10%), carretera (3%)
Atractivos:
- paisajísticos: vistas de Peñalara y de las Cabezas de Hierro y Mediana, bosques: pinar, abundancia de acebos,
- avifauna: pinzones, petirrojos, trepadores azules, carboneros, carboneros garrapinos, buitres leonados, arrendajos
Ortofoto:
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Perfil:
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Recorrido:
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La ruta está descrita en el libro de Juan Pablo Avisón: "Las Mejores Excursiones por... La Sierra de Guadarrama. 45 itinerarios", de Ediciones El Senderista.
Galería
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Bitácora
Fecha:
30 de agosto 2009.
Tras el paréntesis de las vacaciones de agosto, retomamos el senderismo con esta ruta, que es más dura de lo esperado, porque es algo más larga de lo anunciado en el libro, con mucha más pendiente acumulada y, como ya esperábamos, concentrada en la segunda mitad, condiciones empeoradas por el calor que todavía hace a pesar de discurrir por caminos rodeados de pinos y por nuestra falta de entrenamiento. Nos rodea un extenso pinar, sembrado en zonas por numerosos acebos. Abundantes pinzones y varios trepadores azules, carboneros garrapinos y algún carbonero o arrendajo aislados nos entretienen en la marcha, así como una pareja de grandes buitres leonados. Los arroyos llevan poca agua y se cruzan con facilidad. Los puentes, aunque con alguna madera suelta, facilitan el cruce de los algo más caudalosos como el propio río de la Angostura. Comemos y descansamos en el río de Peñalara y acortamos la ruta por El Pinar, pero el camino se pierde y el campo a través de torna demasiado empinado para ser cómodo (en el track ha quedado el camino bueno). La llegada a Casa Marcelino es celebrada con alegría (y alguna bebida fresquita).
Tras el paréntesis de las vacaciones de agosto, retomamos el senderismo con esta ruta, que es más dura de lo esperado, porque es algo más larga de lo anunciado en el libro, con mucha más pendiente acumulada y, como ya esperábamos, concentrada en la segunda mitad, condiciones empeoradas por el calor que todavía hace a pesar de discurrir por caminos rodeados de pinos y por nuestra falta de entrenamiento. Nos rodea un extenso pinar, sembrado en zonas por numerosos acebos. Abundantes pinzones y varios trepadores azules, carboneros garrapinos y algún carbonero o arrendajo aislados nos entretienen en la marcha, así como una pareja de grandes buitres leonados. Los arroyos llevan poca agua y se cruzan con facilidad. Los puentes, aunque con alguna madera suelta, facilitan el cruce de los algo más caudalosos como el propio río de la Angostura. Comemos y descansamos en el río de Peñalara y acortamos la ruta por El Pinar, pero el camino se pierde y el campo a través de torna demasiado empinado para ser cómodo (en el track ha quedado el camino bueno). La llegada a Casa Marcelino es celebrada con alegría (y alguna bebida fresquita).
Recursos
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© Isidro Cuallado. 3 septiembre 2009
