El origen de la pizza es incierto, probablemente evolucionado de panes como el pan plano persa con queso fundido y dátiles de la época de Darío el Grande, o de la focaccia, que parece ser de origen etrusco. El origen de la pizza actual se atribuye normalmente a Nápoles (Italia), y es una de las comidas más difundidas del mundo. La pizza tal como la conocemos proviene del siglo XVII o ya del XVIII, con la incorporación del tomate proveniente de América.
Dado que hasta el último cuarto del siglo XIX no se empezó a comercializar la levadura, la pizza se preparaba originalmente con fermento natural, más conocido como Masa Madre, y así es como la preparamos en esta receta. La Masa Madre (MM) aporta sabor y es más natural que las levaduras comerciales.
Aquí comparto mis primeros intentos con la pizza, aunque mejorados con lo que he ido aprendiendo en sucesivas preparaciones. Tipicamente, preparo la masa de 4 pizzas, uso una al día siguiente para la primera pizza y congelo las otras 3 para usarlas más adelante. Basta con sacar la masa por la mañana y dejarla en el refrigerador para que esté lista para usar por la noche. Mientras se calienta el horno, se da forma a la masa y se prepara el relleno, así que en unos 35 minutos está lista, y eso en un horno lento en calentarse como el mío.
De la masa: (Para 4 pizzas de unos 210gr)
Relleno 1 (Para 1 pizza individual):
Mezclar harina y agua y dejar en autólisis 30 minutos
Añadir y mezclar bien el resto de ingredientes
Amasar hasta conseguir una masa fina y elástica
Dejar reposar en un bol cubierto con papel film hasta casi doblar su volumen; el tiempo necesario dependerá de la temperatura ambiente, serán en torno a 3h.
Desgasificar y dividir en 4 porciones iguales
Las partes que no vayamos a necesitar las podemos envolver en film y congelar. Aguantan bien unos 4 meses.
Las partes que vayamos a necesitar en los próximos días, las envolveremos en papel film y las dejaremos en la nevera un mínimo de 2 días (mejor si son 3 días)
El día que queramos cocinarla:
Sacar de la nevera la porción que queramos consumir y dejar atemperar 1 hora
Ponemos a calentar el horno a 250º, idealmente con una piedra del horno en la parte baja-media del horno.
Enharinar la superficie de trabajo y extender la masa con ayuda de las manos o de un rodillo enharinado hasta el grosor deseado. Si vemos que la masa está demasiado elástica la dejamos reposar 15 minutos y la volvemos a estirar.
Rallamos mozzarella y esparcimos rodajas de berenjena con algo de sal y cebolla previamente rehogadas.
Metemos al horno a 250º. Nos podemos ayudar de papel de horno y de una pala de horno.
Cortamos rodajitas de salmón y finas rodajas de mozzarella.
Sacamos la masa a los 6 minutos y le ponemos encima la mozzarella y el salmón
Volvemos a introducir al horno durante unos 4 minutos.
La masa congelada se puede sacar a la nevera, mantenerla ahí uno o dos días, y usar como la anterior. Otros posibles rellenos son:
Si has probado alguna de las recetas tal cual o has hecho alguna variación, ¡no te olvides de comentar aquí la experiencia!